La polémica se instaló hoy en San Javier tras las declaraciones de la Sra. Leila Bugnon, una de las dueñas del Supermercado San Jorge Autoservicio Donnet, quien habló en Radio Uno sobre el operativo de control municipal y de ASSAL (Agencia Santafesina de Seguridad Alimentaria) que resultó en un importante decomiso de mercadería en uno de sus locales.

La Sra. Bugnon calificó el accionar como "exagerado" y acusó directamente a la Municipalidad de San Javier de llevar a cabo una "persecución" contra su comercio. Dijo que esto viene de hace más de 10 años y que "es una represalia a no quedarse callados y no ser funcionales al poder de turno".

También apareció una sospecha de "pase de facturas por cuestiones políticas, ya que su hijo ha tenido fuertes declaraciones en relación a la administración del gobierno local".

Durante la entrevista radial, la empresaria detalló que el decomiso incluyó costillares vacunos y carne de cerdo, una pérdida que estimó en casi cinco millones de pesos ($5.000.000). La dueña del supermercado aseguró enfáticamente que toda la mercadería decomisada se encontraba "en excelente estado y apta para consumo".

También se reprochó el maltrato y la falta de respeto por parte de varios inspectores municipales, especialmente de G.M, a quién definió cómo "soberbia y arrogante".

"No estamos en contra de los controles ni mucho menos pero me parece que hicieron una puesta en escena exagerada y nos generan un fuerte perjuicio. Hoy no vendimos nada prácticamente en toda la mañana y nos afectan la imagen como comercio, al ser tan desproporcionado el despliegue que hicieron" agregó.

Bugnon argumentó que este tipo de procedimientos, solo sirven para desalentar la inversión local: "de esa manera es imposible invertir y desalientan a quienes quieren generar trabajo. Queremos saber si los controles son solamente en nuestro local o si también se está controlando a otros comercios", señaló en Radio Uno.

En un llamado a la equidad, la Sra. Bugnon solicitó a las autoridades que extiendan los controles al resto del sector comercial. Asimismo, planteó que la atención de ASSAL y el municipio debería centrarse en negocios que, a su parecer, generan sospechas: "hay negocios que sospechosamente venden demasiado barato y eso debería llamar la atención de las autoridades", indicó, sugiriendo la posibilidad de prácticas de competencia desleal o irregularidades en otros puntos de venta.