Se realizó ayer la puesta en funciones del nuevo Administrador General del Hospital de San Javier. Un hecho trascendental para la comunidad, luego de pedirlo tantas veces, se fue el sistema Samco que terminó con más de una década de interventores, para ir a un sistema que -en la teoría - es plural y representativo. 

Una conocida frase, dice que "para conocer realmente a las personas, hay que darles poder" y en la mayoría de los casos se cumple. Lo de debía ser un logro institucional, para todos los sanjavierinos, fue convertido en un mitín político partidario, con la presencia de invitados que solo representan a un partido. No fue invitado el Intendente de la ciudad ni tampoco representantes del gobierno de la ciudad. Solo estaban el Senador José Baucero, el nuevo Administrador José Cabral, integrantes del equipo del hospital, Oscar Ponce y Adrián González del Ministerio de Salud y algunos invitados. 

"Entendemos que en una situación tan delicada como la prestación del servicio de salud pública, donde hemos ofrecido colaboración aunque no siempre tenemos las herramientas para accionar, que hemos colaborado cuando nos han permitido hacerlo, no invitarnos a la asunción de sus nuevas autoridades, es una forma de decir que los responsables de la salud son ellos y los representantes del pueblo de San Javier, bien gracias, no tienen nada que ver. La provincia tiene todo el derecho y la potestad de desigar a quien considere, pero con estas actitudes, en lugar de sumar, están corriendo a quienes podemos sumar y aportar" dijo el Intendente Mario Migno al ser requerido por Radio Uno. 

Desde este medio, hubo consultas hacia el Ministerio de Salud de la provincia y dejaron explícitamente aclarado que "nada tienen que ver con esta determinación, pues las invitaciones partieron del Hospital de San Javier". Es penoso, porque con todos los problemas por los que atraviesa la salud, la gente pide que los representantes trabajen unidos, sin mezquindad y sin importar la ideología partidaria. 

Y eximieron al Gobernador Omar Perotti y a la Ministra Sonia Martorano de estas actitudes. "Cuando se inaugure la nueva obra, la provincia invitará al Intendente, a los representanes del pueblo y seguramente todos cortarán la cinta" deslizó un alto funcionario de salud a Radio Uno. 

No convocar al Intendente o al gobierno local, fuese del espacio político que sea, es desconocer a los sanjavierinos, es creer que un efector que es público puede ser usado a gusto y placer de quienes están al frente del mismo. Y eso lisa y llanamente, está mal, muy mal. Hay que saber que los cargos públicos son circunstanciales, que puede caer en gracia (o no) la cara de quien represente un cargo electivo, pero son personas ungidas por la voluntad popular.