05.03.2023 | 16:49 — ROSARIO
Violencia en Rosario: Mataron a un nene de 11 años, hubo seis homicidios en los pasados tres días y 19 baleados
En lo que va del 2023, se registraron 64 asesinatos y 225 heridos de bala. El Gobierno anunció medidas, pero no logra frenar la ola de crímenes. Esta madrugada mataron a un nene de 11 años e hirieron a otros 3 niños
Por Juan C. Arredondo
“Algo más habrá que hacer”, reconoció desde Salta el presidente Alberto Fernández tras la conmoción generada por el ataque a balazos al supermercado de la cadena Único de la familia de Antonela Roccuzzo y el cartel con una amenaza a Lionel Messi y el intendente Pablo Javkin que dejaron los “gatilleros”, aún no identificados. Desde ese jueves, en Rosario se registraron otros seis homicidios, entre ellos, el absurdo crimen de Maximiliano Geres: el nene de 11 años fue baleado en la vereda de su casa mientras festejaba un cumpleaños.
En ese contexto, el Departamento de Rosario hubo tantos homicidios como días en el año: 64. En tanto, además se registraron 225 heridos de arma de fuego y 69 de arma blanca, y más de 240 causas por abuso de arma.
Hasta el momento, febrero fue el mes más sangriento: 32 homicidios, 110 heridos de armas de fuego y 28 de arma blanca, y 140 abusos de armas. En tanto, los primeros cinco días de marzo, hubo siete homicidios, 19 heridos de arma de fuego y seis de arma blanca, y más de 18 abusos de arma.
El drama de la violencia en Rosario trepó hasta el extremo: los plomos de la balacera en la que murió Geres, también alcanzaron a una niña de 2 años y a dos adolescentes de 13. Ocurrió cerca de las 2.30 de esta madrugada, en Cabal 1.300 bis y pasaje San José de Empalme Graneros, uno de los focos donde se concentra la violencia narco.
Tres horas más tarde, cerca de las 5, un hombre de 24 años fue ejecutado en Campbell y Cisneros, en Triángulo y Moderno, otro barrio caliente de la zona Oeste de Rosario.
Cerca de la medianoche del viernes, Eugenio Campos, de 33 años, fue asesinado por dos hombres que bajaron de un auto color gris sobre calle Rodríguez al 3.800, en el barrio La Guardia. El cuerpo presentaba tres impactos de bala en la cabeza y uno en el hombro.
La escena de otro crimen en Rosario, esta vez un niño de 11 años
Minutos más tarde, en la zona del Pasaje Independencia y la calle Vera Mujica, Daniel Silveira Wilson, de 52 años, fue baleado dentro de su camioneta Ford Ranger color gris. De acuerdo a testigos que presenciaron el ataque, la víctima habría recibido los balazos desde un Volkswagen Cross Fox gris, cuando salió a buscar vinagre para llevar a su casa, según el relato de su esposa. Los peritos contabilizaron un total de 18 impactos de bala en su tórax, estómago, derecho y pierna derecha.
Ya entrada la madrugada del sábado, varias personas armadas ingresaron por un pasillo de Pasaje Villán y Chacabuco, irrumpieron en una casa y balearon a Maximiliano Bazán, de 28 años. Le dieron dos balazos en el cráneo, tres en el pecho, uno en el glúteo y dos en la pierna derecha.
Por último, Marisol Belén Catella fue encontrada muerta en su casa de Crespo al 2.300, de Villa Gobernador Gálvez. La mujer, madre de tres niños, había denunciado por violencia de género y amenazas a su ex pareja, Ángel Ernesto Beltrán, en varias oportunidades. En octubre de 2018, inició una causa por lesiones. En un radio de 200 metros a la redonda del domicilio donde hallaron el cuerpo, la Agencia de Inteligencia Criminal (AIC) detectó tres posibles lugares de punta de venta de drogas.
Este sábado, además, se fugaron tres detenidos que estaban alojados en la comisaría 10ª de la zona Norte. Uno de los policías de esa seccional resultó herido de arma de fuego durante un forcejeo para evitar que huyeran. “Pidieron agua, abren la celda y se produce la pelea. Se trenzaron en lucha con los policías, no solamente esos tres, sino también otros más”, indicó el ministro de Seguridad de Santa Fe, Claudio Brilloni.
El viernes, la Justicia Federal y Provincial coordinó una serie de allanamientos a las prisiones de Marcos Paz, Ezeiza y Rawson por el homicidio de Lorenzo “Jimi” Altamirado, ejecutado frente al estadio de Newell´s, el Coloso Marcelo Bielsa, en una presunta interna de la banda de Los Monos. Al día siguiente, un grupo de policías retirados y en actividad fueron detenidos por otro crimen vinculado a la barra brava.