Martín Lazzaroni nació en el departamento San Justo pero vive en San Javier, tiene 37 años, es papá de 3 chicos y hace un tiempo su vida lamentablemente cambio de manera drástica. Es trabajador policial y siempre fue un muchacho sano, que irradiaba salud y energía. Un día fue al médico por un lunar en un brazo, el cual debía ser extirpado, intervención que se hizo sin mayores complicaciones. La historia fue contada a Radio Uno por Nadia Jalín, su esposa. Ambos mantienen una lucha para que la obra social IAPOS les reconozca un tratamiento imposible de costear de manera particular. 

En 2021, los médicos que lo atendieron decidieron hacerle una biopsia al tejido extraído. Lo mandaron a analizar, pero allí no se hicieron las cosas bien, no detectando que había células malignas y las mismas siguieron avanzando, hasta que un año después, Martín notó en su axila una especie de “pelotitas”. Lamentablemente, el cáncer había estado multiplicándose, sin que se pueda percibir hasta ese instante.

En 2022 se le diagnosticó “melanoma maligno de piel, ganglionar axilar izquierda (tumor primario en piel de antebrazo). El primer tratamiento oncológico lo hizo con quimioterapia, pero un estudio evidenció la progresión de la enfermedad a nivel pulmonar, hepática y cerebral. Lo que refleja la falta de respuestas al tratamiento que recibía.

Desde ese momento comenzó el calvario y la agonía, pues los profesionales le indicaron el tratamiento con Nivolumab/Ipilimumab, una droga cuyo monto total es de $6.000.000 y debe ser suministrada cada 21 días. La patología que padece Martín, merece actuar con suma celeridad, porque se encuentra en riesgo su salud, su vida, ambos valores de preferente tutela y que resultan derechos personalísimos y de raigambre constitucional. De no actuar con rapidez, existe riesgo de vida real, cada minuto su vida pende de un hilo.

Desesperación 

Su estado es desesperante, sin poder respirar, con hipo recurrente, debilidad, falta de aire, dolor de cabeza, piernas y brazos insoportables. Ante la desesperación y al no tener una respuesta positiva desde IAPOS, se pidió una interconsulta vía zoom, a Buenos Aires, con el prestigioso Instituto Alexander Fleming y allí también se ratifica la sugerencia para tratarse con esa droga.

Desde este momento se han hecho múltiples colectas, campañas y movidas de todo tipo para ayudar a la familia, la cual está compuesta por trabajadores y gente de lucha de toda la vida, pero a los que se les hace imposible contar con estos fondos.

Y no es la primera vez que el Instituto Autárquico Provincial de Obra Social deba acceder a pagar este tratamiento. Un caso reciente fue el de un hombre de Romang, de 62 años, quien logró llegar a la inmunoterapia gracias a un recurso de amparo, como medida cautelar en los términos del artículo 232 del Código Procesal Civil y Comercial. El melanoma, el tercer tipo de cáncer de piel más común, es más peligroso y causa la mayor cantidad de las muertes.

Pese a que IAPOS argumentó durante todo un año, que el Nivolumab no estaba autorizado para pacientes en su cuarta etapa de cáncer, rechazando dar la cobertura al 100%, finalmente lo tuvo que aceptar y aplicar en beneficio del afiliado de Romang hace un año atrás.

Actualmente y para el caso Lazzaroni se presentó un pedido de medida cautelar en el Juzgado Civil y Comercial de San Javier, donde la Jueza y equipo tienen en sus manos, una importante posibilidad de impartir una orden mediante la justicia, ya que el Estado ha decidido negarse a realizarlo.