Los cambios drásticos que se dieron en el último tiempo en los humedales santafesinos, marcados por el fuego de los feroces incendios de pastizales y la bajante histórica del río Paraná, obligaron al Estado Nacional y Provincial a tomar medidas para su protección y conservación. 

 

En este sentido, y para conocer a ciencia cierta la extensión territorial de estas áreas, en parte consideradas "reservas" y en gran parte no, el Ministerio de Ambiente y Cambio Climático comenzó en febrero del 2021 el Inventario Provincial de Humedales (IPH), que días atrás presentó sus primeros avances. 

 

Según su definición, el inventario se constituye como un instrumento a través del cual se busca obtener información actualizada georreferenciada sobre la extensión, variedad, características, funciones ecológicas, servicios ecosistémicos y estado de conservación de los humedales dentro del territorio provincial. El Litoral entrevistó a la ministra de Ambiente y Cambio Climático, Erika Gonnet, para conocer los detalles de esta investigación. 

 

"Este inventario, que nace de una decisión política con el gobernador Omar Perotti, es una gran herramienta de gestión porque va a mejorar el conocimiento y la información sobre estos ecosistemas, para poder tener decisiones vinculadas a la conservación y al desarrollo sostenible de los humedales", destacó Gonnet y agregó que necesidad de realizar este relevamiento surgió, en gran medida, "por la situación de emergencia que estábamos atravesando con los incendios, situación que hizo surgir el programa Regenera Santa Fe, donde uno de sus ejes es el inventario, un pilar fundamental para lograr la ley de humedales". 

 

Niveles del inventario
 

"Este inventario permite que se releve, georreferenciar y caracterizar los humedales que tenemos en la provincia", destacó a este medio, Clara Mitchell, ingeniera industrial y directora Provincial de Conservación y Regeneración. A su vez, hizo mención a la dinámica que tienen estos espacios naturales en el tiempo, "las imágenes satelitales cambian en el tiempo. Los humedales la diferencia que tienen con otros ecosistemas es que la definición es funcional y depende del agua. No es fácil traducir las imágenes que obtenemos satelitalmente, que implica un proceso técnico para poder diferenciar en cuatro niveles en los que básicamente cambia la escala". 

 

Con las imágenes satelitales los especialistas pueden analizar el relieve, la geomorfología del lugar (es decir la historia del espacio natural), medir la vegetación y el escurrimiento de las aguas. "Con estas cuatro variables se hacen mediciones para las unidades de paisaje, y luego se hacen visitas al campo para verificar que este relevamiento es correcto", indicó la ingeniera industrial.

 

Los niveles a los que hace referencia Mitchell son: Regiones de humedales (nivel 1); Sistema de Paisajes de humedales (nivel 2); Unidades de paisaje de humedales (nivel 3); Unidades de humedal (nivel 4). Hasta el momento, el IPH en Santa Fe avanzó hasta los niveles 1 y 2, y ahora se avanza en la elaboración del nivel 3. 

 

"Estamos avanzando en una propuesta de reserva hídrica de áreas protegidas en los Bajos Submeridionales. Con Fundación Humedales, la UNL y la Universidad de San Martín, realizaremos el nivel 3 y 4 de lo que falta del río Paraná, desde el Jaaukanigás al norte y hacia Santa Fe", detalló la directora de Conservación y Regeneración, y comentó que estiman tener los resultados finales para marzo del 2023. 

 

 

Humedales heterogéneos 
 

 

Saber qué tipos de humedales se entrelazan en la bota santafesina es un enigma que busca resolverse con este inventario. "Los humedales son ambientes muy variables y heterogéneos. Algunos se inundan cada 10 años y otros que lo hacen cada año. Hay una amplia variedad que hay que conocer porque implica que el manejo de cada humedal sea distinto para hacerlo sostenible", remarcó Mitchell.

 

La realidad marca que estos territorios naturales tienen personas habitándolos. Al consultar a la ingeniera sobre este aspecto indicó que "una de las perspectivas de la conservación es conservar con el humano, porque ya casi no quedan espacios donde no haya actividades humanas".    

 

Enfoque educativo y de gestión
 

Si bien el inventario trata sobre un documento técnico de imágenes satelitales, Mitchell señaló que uno de los objetivos al elaborar el IPH fue darle un marco educativo. "Intentamos que esto sirva para que los santafesinos valoremos nuestros humedales y entendamos lo que son. Porque es una palabra que se puso muy de moda en el último tiempo y no hay que entender que un humedal son solo islas". 

 

Esta educación ambiental no solo se orienta a los vecinos de la provincia, sino también a aquellos municipios y comunas que tienen interrelación con estos ambientes, para que puedan incorporar a los humedales al ordenamiento territorial, a través de usos sustentables. "Es una herramienta para lograr un montón de otras acciones en el territorio", concluyó la ingeniera industrial. 

 

Nuevas áreas y ampliación
 

Dentro del "Regenera Santa Fe", además del inventario de humedales, apunta a la ampliación del Parque Nacional Islas de Santa Fe, que actualmente cuenta con 4.096 hectáreas y está ubicado en el Sitio Ramsar Delta del Paraná, tiene media sanción en la Legislatura para duplicar su superficie. "Cuando uno mira integralmente la provincia, la superficie del Parque Nacional Islas de Santa Fe es muy poco comparado con otras provincias", aseveró Gonnet.  

 

La declaración de nuevas áreas protegidas es otra arista del programa provincial, como así también las reservas hídricas, "un proyecto que realizamos para declarar reserva hídrica en la zona de los Bajos Submeridionales de 300.000 hectáreas", contó la ministra de Ambiente y sostuvo que "son trabajos a largo plazo, al que hay que darle la normativa necesaria y realmente poder hablar que tenemos áreas protegidas que no se expresen solo en un papel".